domingo, 30 de enero de 2011

Pasión por Renoir

Limoges, Francia, 1841-Cagnes-sur-Mer, id., 1919) Pintor francés. A los tres años de edad se trasladó a París con su familia y a los trece su padre lo empleó en un taller de decoración de porcelanas para explotar su extraordinario talento como dibujante. Desempeñó varios oficios más, todos en la misma línea, antes de inscribirse en la Escuela Superior de Bellas Artes de París, en el estudio-taller de Charles Gleyre, donde trabó una amistad duradera con Claude Monet, Alfred Sisley y Fréderic Bazille. Como complemento de su formación artística visitaba con frecuencia el Museo del Louvre para copiar a sus pintores más admirados. A partir de 1863 comenzó a reunirse en el café Guerbois con los pintores que formaron más tarde el grupo de los impresionistas. Sus primeras obras (Retrato de Frédéric Bazille, Diana cazadora) son de carácter tradicional. Su primer paso hacia el impresionismo lo dio durante una estancia con Monet en los baños de La Grenouillère, donde ambos artistas pintaron cuadros en los que apuntan ya la disolución de la pincelada y de los contornos característica del impresionismo. La composición informal, la técnica abocetada y sobre todo la espontaneidad e inmediatez que caracterizan la ejecución de las obras relativas a este lugar de baños de una isla del Sena están en la base del estilo impresionista. Tras su obligada participación en la guerra franco-prusiana (1870-1871), en 1874 presentó varias obras, entre ellas El palco, en la primera exposición de los impresionistas, que suscitó críticas feroces, aunque a Renoir le valió el apoyo de Georges Charpentier, para quien realizó algunas obras (Retrato de Mme. Charpentier y sus hijos) que le abrieron las puertas del Salón. El año 1876 fue fecundo para el artista, ya que realizó tres de sus mejores creaciones, El columpio, Torso de mujer al sol y Baile en el Moulin de la Galette, en las que hace un magnífico estudio de la luz y consigue plasmar con rara maestría los reflejos del sol que se filtran por entre las sombras. Son tres cuadros en los que triunfa ya plenamente la pintura en plein air que propugnaban los impresionistas.
Durante estos años, Renoir siguió participando, aunque no con regularidad, en las exposiciones del grupo. En 1881, cuando se vio libre por primera vez de agobios económicos gracias a la adquisición sistemática de sus obras por el marchante Durand Ruel, decidió visitar Argelia (Fiesta árabe en Argel) e Italia. El contacto en este último país con las obras de los grandes maestros sumió al artista en una profunda crisis, durante la cual llegó a afirmar que no sabía «ni pintar, ni dibujar». Renunció entonces al impresionismo y se orientó hacia una pintura más lineal y de dibujo más sólido, con obras como Los paraguas, Baile en el campo y Baile en la ciudad. Sin embargo, en 1889 volvió de nuevo a su estilo impresionista, centrado ahora en el desnudo femenino plasmado con un colorido cálido en el que abundan los tonos anaranjados. La obra cumbre de esta etapa final de su vida es Las bañistas, una composición en la que las figuras se funden con la naturaleza transfiguradas por la luz y el color. Aquejado de reumatismo articular, afección que llegó a dejarlo paralítico, se refugió en Cagnes-sur-Mer, donde se mantuvo activo hasta el final de sus días y realizó, además de pinturas, algunas esculturas. Renoir, uno de los pocos impresionistas que prefirieron la figura humana al paisaje, murió siendo un artista universalmente famoso, e incluso en 1914 pudo ver cómo entraban en el Louvre algunas de las obras por él pintadas.

lunes, 24 de enero de 2011

Sobran las palabras





Acuarela
En los mapas del cielo, el sol siempre es amarillo
y la lluvia o las nubes no pueden velar tanto brillo
ni los árboles nunca podrán ocultar el camino,
de la luz hacia el bosque profundo de nuestro destino.
Esa hierba tan verde, se ve como un manto lejano,
que no puede escapar, que se puede alcanzar, sólo con volar.
Siete mares he surcado, siete mares color azul,
yo soy nave, voy navegando, y mi vela eres tú...
Bajo el agua veo peces de colores,
van donde quieren, no los mandas tú...
Por el cielo, va cruzando, por el cielo color azul,
un avión que vuela alto, diez mil metros de altitud,
desde tierra lo saludan con las manos,
se va alejando, no se dónde va, no se dónde va...
Sobre un tramo de vía, cruzando un paisaje de ensueño,
en un tren que me lleva de nuevo a ser muy pequeño,
de una América a otra, tan sólo es cuestión de un segundo,
basta con desearlo y podrás recorrer todo el mundo...
Un muchacho que trepa, que trepa en lo alto de un muro,
si se siente seguro, verá su futuro con claridad...
Y el futuro, es una nave, que por el cielo volará,
a Saturno, después a Marte, nadie sabe dónde llegará,
si le ves venir, si te trae amores, no te los robes sin apurar.
Aprovecha, los mejores, que después no volverán.
La esperanza, jamás se pierde, los malos tiempos pasarán,
piensa que el futuro es una acuarela y tu vida un lienzo,
que colorear, que colorear...
En los mapas del cielo el sol siempre es amarillo 
(tú lo pintarás)
y la lluvia o las nubes no pueden velar tanto brillo 
(tú lo pintarás)
basta aún desearlo y podrá recorrer todo el mundo 
(tú lo pintarás)

domingo, 23 de enero de 2011

La colonización de África en el siglo XXI





Para quien dude aun que China va camino de convertirse en una gran potencia mundial sino en la primera, basta con que observe el siguiente mapa. Todos vemos a diario como en cualquier ciudad de nuestro país, por pequeña que sea, los centros de comercio chino se multiplican sin cesar. Pero su expansión no solamente se está desarrollando en los países de occidente fuertemente capitalizados, sino que además está tomando posiciones en países del tercer del mundo.

China ha encontrado en África en el siglo XXI un territorio lleno de recursos, algo que Europa ya explotó durante la época de colonización de finales del siglo XIX y mediados del siglo XX. Los datos son claros: el comercio y las inversiones chinas en el continente africano se han multiplicado por diez desde el año 2000 hasta el 2008.

Y aunque aparentemente parece que China poco tiene que decir en un continente tan alejado culturalmente, lo cierto es que ambos se benefician: mientras China realiza inversiones económicas en infraestructuras (algo sin precedentes desde la descolonización de mediados del siglo XX), África proporciona las materias primas y la energía que la voraz economía china demanda.
Fuente: Diario El País


martes, 18 de enero de 2011

Cine dentro del cine

Ficha técnica.
Título: También la lluviaTítulo original: Even the RainPaís: España / México / Francia
Estreno en España: 05/01/2011        Productora: Morena Films Director: Icíar Bollaín Guión: Paul Laverty Reparto: Luis Tosar, Gael García Bernal, Juan Carlos Aduviri, Karra Elejalde, Raúl ArévaloCalificación: No recomendada para menores de 7 años

Sinopsis.
También la lluvia está inspirada en la Guerra del Agua que tuvo lugar en Cochabamba en Abril del 2000, y cuenta la historia de Sebastián y Costa, un director y un productor que quieren hacer una película sobre Cristóbal Colón que de la vuelta al mito. La historia de un Colón obsesionado por el oro y represor de indios y también la de quienes lo denunciaron: los padres Bartolomé de las Casas y Antonio Montesinos. Pero mientras ruedan en Cochabamba estalla el conflicto por la privatización y venta a una multinacional del sistema de aguas de la ciudad, la tristemente famosa (y real), Guerra del Agua del año 2000.

Crítica.
     Metacine, podría ser la etiqueta de esta correcta película de la directora Icíar Bollaín, basada en una historia del escocés (y guionista habitual de Ken Loach), Paul Lavery. Caracterizada por un ataque al sistema, al poner de manifiesto el imperialismo, la colonización, las multinacionales, mediante un buen guión donde se mezclan tres historias.
      La primera, el rodaje en Bolivia de una película para desmitificar la figura de Cristóbal Colón.
     La segunda, la guerra del agua, basada en hechos reales ocurridos en Cochabamba en el año 2000.
      La tercera, considerada la unión entre ambas formada por los extras de la película y el personal del rodaje (relaciones entre ambos).
      Contando además con una buenas interpretaciones:
      Colón (Karra Elejalde)
      El productor (Tosar)
      El realizador (García Bernal)
      Icíar Bollaín hace un planteamiento inteligente para evitar en todo momento el maniqueísmo y la toma de posición.
      Tan sólo señalar que la escena final (Teresa  pide ayuda al productor para salvar a su hija), a juicio de quienes vimos la película, sobra.



viernes, 14 de enero de 2011

Cine clásico

Datos de la película:

Tí­tulo Original: The General Died at Dawn
Tí­tulo Traducido: El general murió al amanecer
Género: Drama. Romance. Aventuras | Drama romántico
Pais: Estados Unidos  
Duración: 97 min.
Año de lanzamiento: 1936 
Director: Lewis Milestone
Guion: Clifford Odets (Historia: Charles G. Booth)
Musica: Werner Janssen
Fotografia: Victor Milner (B&W)



Sinopsis:
Ambientada en las luchas por el poder que asolaron el norte de China a principios de los años 30. Gary Cooper da vida a un extraño aventurero americano cuyo idealismo le lleva a tomar partido por la legión de campesinos hambrientos que asiste impotente a la destrucción de sus casas y sus cosechas por parte de los poderosos señores de la guerra. Enfrente suyo un ambicioso general al que secunda un curioso ejército compuesto por doce mercenarios que tan solo piensan en ejercer el poder de forma despótica, campa a sus anchas sembrando la desolación y el terror. 

Esta situación insostenible para muchos habitantes de la región comienza a cambiar en el momento en que el aventurero americano emprende un peligroso viaje hacia Shanghay en busca de dinero y armas con las que encabezar una revuelta condenada al fracaso.



jueves, 6 de enero de 2011

La casa en el árbol



Matar a un ruiseñor

Jean Louise Finch evoca una época de su infancia en Alabama (EE UU), cuando su padre, Atticus, decidió defender ante los tribunales a un hombre negro acusado de violar a una mujer blanca. Matar a un ruiseñor muestra una comunidad dominada por los prejuicios raciales, la desconfianza hacia lo diferente, la rigidez de los vínculos familiares y vecinales. Y con un sistema judicial sin apenas garantías para la población negra. 
Un auténtico clásico de la literatura estadounidense del siglo XX que ha cautivado a millones de lectores. 
Obtuvo el Premio Pulitzer en 1961.



 Nelle Harper Lee
Escritora estadounidense nacida en Monroeville, Alabama, el 28 de abril de 1926. Es autora de una única novela, Matar a un ruiseñor (To Kill a Mockingbird, 1960, ganadora del Pulitzer al año siguiente), un alegato contra el racismo en el profundo sur estadounidense protagonizado por Atticus Finch, un respetado hombre blanco de la comunidad, modelo de conducta para todos, que se hace cargo de la defensa de un hombre afroamericano acusado falsamente de violar a una mujer blanca. La novela supuso un gran éxito para la autora, que jamás publicó nada más a excepción de un puñado de pequeñas contribuciones posteriores en revistas como Vogue o McCall´s, rehuyendo de todo trato con la prensa. Matar a un ruiseñor fue llevada al cine en 1962 por el director Robert Mulligan, siendo los protagonistas Gregory Peck (que recibió un Oscar por su interpretación), Mary Badham, Phillip Alford y Robert Duvall.